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Pérez Touriño y Elena Salgado rechazan modificar el reglamento de la comisión bilateral Xunta-Estado en contra de la opinión de Anxo Quintana

La ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, y el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, descartaron modificar el reglamento de la Comisión bilateral de cooperación entre Xunta y Estado para no incluir "elementos que perturben" la agenda inmediata de este órgano y remitieron a la próxima reforma del Estatuto de Autonomía para plantear otros "esquemas" referentes a la relación entre Gobierno central y autonómico. De este modo rechazaron la propuesta del vicepresidente de la Xunta, el nacionalista Anxo Quintana, quien apostó por revisar la comisión Xunta-Estado para poder discutir la financiación autonómica o para hacer un seguimiento de las obras pendientes.

"Vamos a desarrollar la agenda prevista y no vamos a introducir elementos que perturben el desarrollo positivo de esa colaboración", sentenció Touriño tras la reunión que mantuvo en el Pazo de Raxoi con la ministra y en la que también participaron el propio vicepresidente autonómico; el conselleiro de Presidencia, José Luis Méndez Romeu; y el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras. En la comparecencia posterior, que protagonizaron únicamente el jefe del Ejecutivo autonómico y la titular de Administraciones Públicas, Salgado insistió en que "lo que hay que hacer" es "desarrollar el programa" previsto para este año 2008 en el marco de la comisión bilateral, que prevé el traspaso de nueve competencias y que, a su juicio, es un número "importante". "Vamos a trabajar sobre ese programa sin cuestionarnos futuribles que en este momento no forman parte de nuestra agenda inmediata", añadió. Asimismo, abogó por ser "positivos y posibilistas" y se mostró partidaria de "avanzar todo lo posible" con el actual Estatuto de Autonomía que, a su entender, "permite avanzar más".

En la misma línea, el presidente de la Xunta subrayó que "la agenda prevista, marcada y acordada por las partes tiene por delante un amplio número de transferencias". "Esa es nuestra agenda y ese es nuestro trabajo", resolvió. Finalmente, consideró que el marco idóneo para revisar la relación Xunta-Estado será el debate de la reforma del Estatuto de Autonomía que, apostilló, "se hará en el momento propicio políticamente". En este sentido, culpó al PP de la fallida reforma estatutaria aunque negó que esto produzca "nostalgia y preocupación" puesto que, remarcó, "hay mucho trabajo por delante". "El nuevo Estatuto al que nunca renunciaré planteará los esquemas que deba plantear en la relación entre Xunta y Estado", concluyó.

Quintana participó en la reunión que Touriño mantuvo con Elena Salgado, a la que también acudieron el conselleiro de Presidencia, José Luis Méndez Romeu, y el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras. En la comparecencia posterior, que protagonizaron únicamente el presidente de la Xunta y la ministra, detallaron que antes de final de año se ultimarán los nueve traspasos pendientes pactados en diciembre de 2007. Vicepresidencia consideró este hecho "muy positivo" y celebró la "disposición" de Salgado a fijar esta "agenda de trabajo". "Esta es sin duda la prioridad política como bien dijo el presidente de la Xunta", reza el comunicado.

El vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, convocó por carta a los tres grupos parlamentarios a una reunión el jueves 8 de mayo para exponer su propuesta para reformar el reglamento de la Comisión Bilateral de Cooperación entre el Ejecutivo central y el gallego, que a su juicio, "no perturba" el proceso de transferencia de competencias y "no precisaría más que un acuerdo entre ambas partes". Fuentes de la Vicepresidencia explicaron a Europa Press que, en la reunión del jueves, Quintana argumentará ante los grupos parlamentarios la idoneidad de reforzar este órgano para "homologar" las relaciones de Galicia con el Estado y situarlas "al mismo nivel" que Cataluña, pese a que esta vía fue rechazada por el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, y por la ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado.

Así, el dirigente nacionalista apuesta por que en la nueva comisión entre la Xunta y el Gobierno central se puedan negociar "elementos vitales y decisivos para Galicia", como las claves de la nueva financiación autonómica o realizar un seguimiento de la ejecución de las infraestructuras estatales en la comunidad gallega. La reforma que impulsa el vicepresidente de la Xunta recoge que, a través de la Comisión Bilateral, se arbitre la participación de la Xunta en el ejercicio de las competencias estatales que afectan a la comunidad, mediante la emisión de un informe preceptivo y no vinculante acerca de materias como la declaración de espacios naturales protegidos, la calificación del interés general de una obra, o la autorización de instalaciones de producción y transporte de energía, entre otras. Asimismo, la propuesta también apuesta por impulsar "desde el punto de vista bilateral", la realización de programas conjuntos en distintos ámbitos sectoriales y potenciar "las fórmulas de desarrollo, formulación paritaria y ejecución exclusiva de todos los planes de estimulación, reestructuración y reconversión de sectores industriales y económicos o de áreas geográficas".

El vicepresidente de la Xunta pretende conseguir en este campo "un acuerdo amplio" entre las fuerzas parlamentarias similar al que se obtuvo para remitir al Congreso de los Diputados la proposición de ley para reclamar la transferencias en materia de tráfico y seguridad vial. Frente a la opinión del presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, quien estimó que habría que aguardar a la reforma del Estatuto de Autonomía de 1981 para introducir cambios en la Comisión Bilateral Xunta-Estado, el vicepresidente de la Xunta descarta que sea necesario un nuevo marco estatutario y defiende que el cambio reglamentario se puede hacer "por acuerdo de las dos partes". "No hay que modificar ninguna pieza fundamental del ordenamiento; con un esfuerzo de cooperación política podemos dotarnos de un instrumento de negociación como el de otras comunidades autónomas", aseguraron fuentes de Vicepresidencia en referencia a Cataluña.

Asimismo, el departamento de Anxo Quintana argumentó en un comunicado que el cambio del reglamento de este órgano no interferiría en el proceso de transferencia de las nueve competencias que se están ultimando. "Coincido plenamente en la inconveniencia de perturbar las relaciones de la Xunta con el Estado", replicó Quintana al presidente autonómico, quien rechazó esta mañana modificar la comisión Xunta-Estado para no incluir "elementos que perturben" la agenda inmediata de este órgano y remitió a la próxima reforma del Estatuto de Autonomía para plantear otros "esquemas" referentes a la relación entre Gobierno central y autonómico.

El vicepresidente reafirmó que presentará esta propuesta a los grupos parlamentarios con el objetivo de que "la unidad política y la voluntad de autogobierno en Galicia sirvan para "modificar democráticamente las posiciones de Madrid". No obstante, consideró "normal" la "distancia" con la que, a su entender, la ministra acogió su propuesta puesto que "es la lógica y tradicional actitud de la Administración del Estado, siempre celosa de sus competencias". En esa línea, aseguró que "es la misma actitud" que mantuvo respecto a la trasferencia del tráfico a Galicia. En cambio, celebró que hoy aceptase como "normal" la proposición de ley presentada por el Parlamento gallego y "la sometiese al veredicto" de las Cortes, un "gesto" que agradeció.

R.