Skip to main content

El Rey comprueba en Ferrol las capacidades de la Fuerza de Protección de la Armada

El Rey Don Juan Carlos visitó el Cuartel del Tercio Norte de Infantería de Marina de Ferrol (A Coruña), acompañado del Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada, Manuel Rebollo García, para conocer el funcionamiento y las capacidades de la Fuerza de Protección de la Armada, en una demostración en la que participaron casi 500 infantes de Marina procedentes de distintos puntos de España.

La Fuerza de Protección, creada en el año 2004, agrupa a 1.634 militares, el 10% mujeres. Entre sus misiones figura proteger a las personas, vigilar edificios militares y bases y custodiar barcos militares. En la actualidad, una sección de la Fuerza de Infantería de Marina está desplegada en el operativo internacional destinado a Bosnia-Herzegovina. En Galicia, colabora en la disuasión y prevención de incendios, en un operativo que se prolongará hasta finales de septiembre. Entre sus cometidos, también destacó el dispositivo de seguridad desarrollado tres días antes de las elecciones generales, con vigilancia en infraestructuras críticas, como refinerías, centrales nucleares, y vías férreas, o el mantenimiento de la seguridad en el trayecto del tren entre Madrid y Zaragoza, con motivo de la Exposición Internacional.

A las 12.00 horas, el Rey llegó a Ferrol, vestido con el uniforme de trabajo de la Armada -uniforme diario modalidad C-, después de haber aterrizado en el aeropuerto de Alvedro (A Coruña) y desplazarse a Ferrol por vía terrestre. Tras pasar revista a la fuerza, presenció el desfile de los infantes de marina en la entrada del Tercio Norte. Tras ello tuvo lugar una exhibición dinámica, consistente en un simulacro de rescate de un piloto abatido en terreno enemigo, para lo que se desplegó una tienda de campaña y se utilizaron varios vehículos. En el rescate, los infantes de Marina tuvieron que descender desde el piso superior del cuartel en tirolina. En el acto se congregaron cerca de medio millar de militares, procedentes del Tercio Norte de Ferrol, y de las demás unidades que conforman la Fuerza de Protección: el Tercio Sur de San Fernando, el Tercio de Levante de Cartagena, la Agrupación de Madrid, y la Unidad de Seguridad de Canarias.

El acto concluyó con el saludo, a las 13.00 horas, del Rey a las autoridades civiles. Acudieron el presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño; la presidenta del Parlamento de Galicia, Dolores Villarino; el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras; y el alcalde de Ferrol, Vicente Irisarri. Se trata de la novena visita que el Rey realiza a Ferrol. La última estancia tuvo lugar el pasado 10 de marzo, cuando asistió a la botadura del buque de proyección estratégica LHD 'Juan Carlos I', construido en los astilleros de Navantia Ferrol-Fene y que es el mayor de la Armada española. Asimismo, presidió la inauguración del Museo de la Exposición Naval (Exponav).

El Rey Don Juan Carlos estuvo acompañado por el Jefe del Estado Mayor de la Armada (Ajema), el almirante general Manuel Rebollo García, en la que ha sido su primera visita a la ciudad desde que accedió al cargo. La comitiva militar estaba completada por el comandante general de la Infantería de Marina, el general de división Juan Manuel Chicharro Ortega; el jefe de la Fuerza de Protección, el general de brigada Ramón López Nuche; el Almirante Jefe del Arsenal, Santiago Bolívar Piñeiro, y el jefe del Mando de Acción Marítima de Ferrol, el contralmirante Gonzalo Sirvent Zaragoza, además del Jefe del Tercio Norte de Ferrol, el coronel Juan Ángel López Díaz.

A la entrada del cuartel del Tercio Norte, se concentró un grupo de unas treinta personas, en apoyo al cabo Jorge Miguel Gago Chao, expedientado por sus declaraciones en torno al accidente de la Fragata Extremadura en el que fallecieron dos militares en diciembre de 2005. Con una pancarta en la que figuraba la frase "Libertad de expresión, retirada expediente, transparencia y claridad", reclamaron que se aclarasen las causas del siniestro y que se retirase el expediente abierto al cabo, que podría suponer su arresto en prisión militar durante un período de dos meses.

R.