Touriño rechaza el organismo de crédito propuesto por Quintana y le advierte de que la campaña electoral gallega aún no empezó

El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, advirtió de que "no hay respuestas autárquicas ni nacionalistas" para afrontar la crisis económica y rechazó el organismo gallego de crédito oficial propuesto por su vicepresidente, Anxo Quintana, al cual advirtió de que la campaña electoral "aún no empezó". Frente al instituto gallego de crédito oficial para potenciar la economía productiva que propone Quintana, el presidente de la Xunta apostó por medidas "cohesionadas y globales" y defendió las respuestas ya adoptadas en Galicia. "Estamos trabajando para hacer lo que hay que hacer. Yo no estoy en campaña electoral", aseveró.

A preguntas de los periodistas durante una visita al Centro Integral de Formación Profesional (CIFP) Compostela, el máximo mandatario gallego aseguró que "no es el momento de inventar respuestas aisladas", sino "coordinadas y potentes", tanto en el ámbito internacional como entre los gobiernos de España y Galicia, porque, a su juicio, "no existen recetas mágicas ni propuestas milagrosas, ni vale sacarse de la manga varitas mágicas". En opinión de Touriño, la Comunidad gallega ya tiene "los instrumentos que necesita" y cuenta con "un Gobierno unido y cohesionado" que está "trabajando en la dirección acertada". Así, recordó el plan de activación de recursos financieros, que dispone de más de 1.500 millones, 500 de ellos dirigidos a que la financiación "llegue" a las pymes, mediante la colaboración y el "trabajo activo" con las entidades financieras de Galicia. "Es lo que hace falta hacer y lo que se está haciendo", garantizó Touriño, al tiempo que destacó que la Comunidad gallega es "pionera" en España en la implantación de estas medidas. Según dijo, el Gobierno que lidera "debe responder frente a la crisis" y "lo está haciendo" en colaboración con los sindicatos, los empresarios y las entidades financieras, porque Galicia "tiene los instrumentos que debe tener".

Celebró que lo "emprendedor" de la autonomía se basa en los tres pilares de "diálogo social", apuesta por el capital humano -"formación y educación por encima de todo"- y de "mejora" de la productividad y competitividad, con "más capital físico y tecnológico y más bombeo de inversión pública". "La mejor respuesta a la crisis", zanjó, pasa por diseñar políticas activas de empleo y formación, por estimular la demanda y por hacer que la financiación llegue a las empresas mediante la colaboración "muy positiva" con el Igape, Xesgalicia, la Xunta y las entidades financieras. "Todo esto está dando buenos resultados", insistió Touriño.

Quintana anuncia que el BNG "concretará" su propuesta para crear un organismo de crédito gallego "en los próximos días"

El portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, anunció que la Executiva "concretará" la propuesta de creación de un organismo de crédito oficial gallego "en los próximos días y avanzó que este organismo tendrá como objetivo "dotar de liquidez" al sistema financiero. "Hay que darle concreción institucional, en cuanto a la capacidad de intervención financiera y a las normas básica que lo deben regular", afirmó en Allariz, donde acompañó al ex presidente de la Generalitat de Catalunya Jordi Pujol durante una visita a la localidad alacarina.

Anxo Quintana apuntó que un grupo de economía del Bloque trabaja "en esa dirección" y será ése "el encargado" de precisar los detalles de la propuesta. De este modo, la formación frentista dará a conocer, "en cuanto sea posible", la composición del organismo, el capital inicial con el que tiene que partir y las normas básicas de funcionamiento. Quintana avanzó que, "en un intento por sumar esfuerzos", el órgano contará con la participación de "entidades de capital riesgo de las Cajas de Ahorro". "Sólo así", resumió, constituirá una herramienta "potente" con capacidad para "plasmar en la realidad la política de financiación de la economía productiva" que el Gobierno gallego "quiere poner en marcha". Este organismo se suma a las medidas "muy positivas" que, en opinión del político autonómico, está poniendo en marcha la Xunta de Galicia para "paliar" las "insuficiencias" del Gobierno central en la gestión de la crisis financiera.

El vicepresidente del Ejecutivo gallego calificó las decisiones tomadas por el Gobierno central de "insuficientes", al considerar que "incluso se pueden volver en nuestra contra" si no se ven acompañadas por "otras reglas y normas para dirigir a los mercados de acuerdo con los intereses de las minorías sociales". Quintana hizo hincapié en la "posición crítica" que el BNG mantuvo siempre en este sentido y destacó la "necesidad" de "usar las capacidades competenciales" y de "autogobierno".

Feijóo propone que la Xunta ahorre 120 millones en gastos "superfluos" para "reorientarlos" a "políticas anticrisis"

El presidente del Partido Popular de Galicia (PPdeG), Alberto Núñez Feijóo, reclamó a la Xunta que ponga en marcha un "plan de austeridad" para reducir los gastos burocráticos de la Administración gallega en 120 millones de euros, cantidad que, defendió, debe "reorientarse" a desarrollar "políticas anticrisis" en materia de empleo, vivienda, formación profesional e inversiones. "Se trata de gastar menos en la Administración y más en la gente", ilustró Feijóo tras la reunión semanal del Grupo Parlamentario Popular, y enmarcó esta propuesta -formalizada a través de una enmienda a los presupuestos de la Xunta para 2009- en la "política de ideas" del PPdeG.

En concreto, el líder de la oposición desgranó estos "20.000 millones de las antiguas pesetas" y, en primer lugar, defendió la reducción en 41 millones de euros la partida de personal que, a su entender, debe situarse al mismo nivel que en los presupuestos de 2007 más el Índice de Precios al Consumo (IPC). También propuso rebajar el personal eventual de gabinete y, al respecto, dio por bueno el existente con el anterior Gobierno popular, que permitiría un ahorro de 2,3 millones. También planteó un ahorro de 22 millones en la partida de bienes corrientes y servicios -2,5 en alquileres y cánones y 19,4 en suministros-, así como una reducción del 40 por ciento de las atenciones protocolarias y representativas, publicidad y propaganda, reuniones y conferencias y cobertura informativa, que generaría un ahorro de seis millones de euros.

El plan de austeridad propuesto por la oposición también afecta a los gastos en telefonía y electricidad, que, según el PPdeG, se pueden reducir en unos seis millones de euros; y a la llamada administración paralela, en la que plantean un ahorro superior a los 22 millones de euros. Aunque reconoció que no existen "recetas mágicas ni conejos que salgan de la chistera" para paliar los efectos "devastadores" de "la crisis más importante de la historia de Galicia", Feijóo reivindicó la necesidad de reducir estos gastos "superfluos e innecesarios" en el actual contexto económico. A su entender, este ahorro, que no afectaría "para nada" al gasto social, permitiría "reorientar" estos fondos a políticas que palíen los efectos de la crisis en materia de empleo, vivienda, formación profesional e inversiones. Según enfatizó, la oposición da por buenos los gastos del anterior Gobierno popular para "ser responsables con la herencia" dejada por el PPdeG y no caer "en la demagogia".

Para el líder de la oposición, este plan de austeridad "prudente, posible, pensado y racional" debe ser el "primer paso" antes de acometer una reforma "en profundidad" de la Administración autonómica, que se encuentra "descoordinada e hipertrofiada" en la actualidad. Con esta propuesta, que se comprometió a llevar a cabo si llega a la Xunta tras las próximas autonómicas, Feijóo dio por probado el "compromiso" de la oposición con la actual situación de crisis, además de su "preocupación" compartida con la ciudadanía. En esta línea, sumó este plan de austeridad a la batería de medidas fiscales planteadas por el PPdeG la pasada semana, que incluyen propuestas dirigidas a las 200.000 familias gallegas hipotecadas así como a los 235.000 autónomos y a las 47.000 pequeñas y medianas empresas de la comunidad. Así, consideró que "hay instrumentos" para poder hacer frente a la crisis y, frente a esto, opinó que "lo peor que se puede hacer es no hacer nada".

Fotografía: archivo GD.