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Xacobeo 2010: Benedicto XVI advierte desde Compostela que en España se desarrolló un secularismo fuerte y agresivo

Benedicto XVI ha declarado que España es el "país originario de la fe", pero también donde se han desarrollado "un laicismo, un anticlericalismo, un secularismo fuerte y agresivo", ha alertado en la entrevista que concedió a los periodistas que le acompañan en el avión. Según destaca el diario italiano Il Corriere della Sera, el Papa ha recordado las divergencias presentes en España y las hostilidades de una parte del país, y ha afirmado que España desarrolló "a partir de los años 30, cuando los católicos fueron perseguidos" un laicismo, un anticlericalismo y un secularismo "fuerte y agresivo", según informa el diario italiano 'La Stampa'.

Este laicismo agresivo, según el Pontífice, es común también actualmente "en otros lugares de occidente", motivo por el cual ha instituido el nuevo dicasterio del Vaticano, el Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización. Además, el Papa ha afirmado que el enfrentamiento entre "fe y modernidad" es "muy vivaz" en España. Por ello, ha llamado a un "encuentro entre la fe y la laicismo y no a una confrontación", según señala el diario francés 'Le Parisien'. Asimismo, el Papa ha destacado a los periodistas que el peregrinaje de los fieles de toda Europa "ha formado la identidad del continente" y ha manifestado que "el camino de Santiago es la base de la formación de la unidad espiritual del continente europeo", según señala 'La Stampa'.

Según ha puntualizado, en Santiago "los peregrinos se han encontrado y han construido una identidad común europea" y ha destacado que en Europa "la continuidad de la fe debe intentar renovarse". Finalmente, ha añadido que "en occidente cada país tiene un modo diferente de vivir este problema" y por ello, a su juicio, "vale también de un modo fuerte para España".

Benedicto XVI invita desde Compostela a España a proyectar su futuro desde la auténtica verdad de la libertad y de la justicia

El Papa Benedicto XVI, a su llegada al Aeropuerto de Santiago, ha destacado que acude a Compostela "como peregrino" para unirse a los caminantes que "fueron creando una vía de cultura, de oración y conversión" y ha invitado a España y a Europa "a edificar su presente y a proyectar su futuro" desde "la verdad auténtica del hombre, la libertad que respeta esa verdad y desde la justicia para todos", comenzando "por los más pobres y desvalidos". Tras el saludo de Su Alteza Real el Príncipe de Asturias, don Felipe de Borbón, el Pontífice ha agradecido primero las palabras del heredero de la Corona de España, así como "a cuantos han colaborado generosamente para que este breve, pero intenso viaje a Santiago y a Barcelona, sea del todo fructuoso". El Papa realizó su discurso en un perfecto castellano y lo finalizó con unas palabras en gallego, concluidas con un "moitas gracias".

Benedicto XVI ha recalcado el papel del hombre que, ha asegurado, "en lo más íntimo de su ser está siempre en camino, en busca de la verdad". "La Iglesia participa de ese anhelo profundo del ser humano. Al mismo tiempo, lleva a cabo su propio camino interior, aquel que la conduce a través de la fe, la esperanza y el amor, a hacerse transparencia de Cristo para el mundo", ha afirmado, al tiempo que ha incidido en que "ésta es su misión y éste su camino: ser cada vez más, en medio de los hombres, presencia de Cristo". "Vengo como peregrino en este Año Santo Compostelano y traigo en el corazón el mismo amor a Cristo que movía al Apóstol Pablo a emprender sus viajes, ansiando llegar también a España. Deseo unirme a esa hilera de hombres y mujeres que, a lo largo de los siglos, han llegado a Compostela desde todos los rincones de la Península y de Europa, e incluso del mundo entero, para ponerse a los pies de Santiago y dejarse transformar por el testimonio de su fe", ha reivindicado el Santo Padre. "Siento una profunda alegría al estar de nuevo en España, que ha dado al mundo una pléyade de grandes santos, fundadores y poetas, como Ignacio de Loyola, Teresa de Jesús, Juan de la Cruz, Francisco Javier, entre otros muchos; la que en el siglo XX ha suscitado nuevas instituciones, grupos y comunidades de vida cristiana y acción apostólica; y en los últimos decenios, camina en concordia y unidad, en libertad y paz, mirando al futuro con esperanza y responsabilidad", ha manifestado Benedicto XVI. En su saludo, ha añadido que España, "movida por su rico patrimonio de valores humanos y espirituales", busca asimismo "superarse en medio de las dificultades y ofrecer su solidaridad a la comunidad internacional".

Benedicto XVI, tras recordar que Juan Pablo II "desde Compostela exhortó al viejo continente a dar nueva pujanza a sus raíces cristianas", ha defendido una España y una Europa "no sólo preocupadas de las necesidades materiales de los hombres, sino también de las morales y sociales, de las espirituales y religiosas, porque todas ellas son exigencias genuinas del único hombre, y sólo así se trabaja eficaz, íntegra y fecundamente por su bien"

En su saludo en el Aeropuerto de Lavacolla, el Papa ha recordado que, tras la visita a Santiago, se desplazará a Barcelona "para alentar la fe de sus gentes acogedoras y dinámicas". "Fe que inspiró al genial arquitecto Antonio Gaudí a emprender en esa ciudad, con el fervor y colaboración de muchos, esa maravilla que es el templo de la Sagrada Familia", ha dicho, para añadir: "tendré la dicha de dedicar ese templo, en el que se refleja toda la grandeza del espíritu humano que se abre a Dios". Asimismo, ha puesto en valor, en general, la "hermosa geografía" que visitará en esta ocasión, en referencia a Santiago de Compostela y Barcelona, y ha dicho que las aportaciones e iniciativas de la "dilatada historia" del país le "dan pie para ensanchar" su "pensamiento a todos los pueblos de España y de Europa".

El Pontífice finalizó su saludo en el aeropuerto con unas palabras en lengua gallega para "renovar" su "cariño y cercanía" a los "amadísimos hijos de Galicia, de Cataluña y de los demás pueblos de España". "Al encomendar a la intercesión de Santiago Apóstol mi estancia entre vosotros, suplico que sus bendiciones alcancen a todos. Muchas gracias", concluyó.

El Príncipe resalta el compromiso de Benedicto XVI "con la paz, la libertad y dignidad del ser humano"

Su Alteza Real el Príncipe Felipe, que ha acudido junto a su esposa, doña Letizia, al Aeropuerto de Santiago a recibir al Papa Benedicto XVI, ha resaltado en sus palabras de bienvenida el "enorme aprecio" por el "compromiso" del pontífice "con la paz, la libertad y la dignidad del ser humano". "Nos reconforta muy especialmente en los tiempos complejos y de crisis que vive el mundo. Tiempos en los que la guerra y el terrorismo, el hambre y la pobreza, la injusticia y el dolor, requieren de la firmeza, del compromiso personal y del esfuerzo de los gobernantes de la tierra y de todos los hombres y mujeres de buena voluntad", ha aseverado don Felipe.

El heredero de la Corona española ha afirmado que es "un gran honor y una alegría especial" darle, junto a la Princesa de Asturias, "la bienvenida más cordial y respetuosa a España en nombre de SS. MM. los Reyes, de nuestras instituciones y del pueblo español". "Deseamos de corazón que durante vuestra nueva visita pastoral a nuestro país tengáis una estancia muy feliz, tanto aquí en Galicia como en Cataluña, ambas tan representativas de la belleza, diversidad y hospitalidad de nuestras tierras", ha manifestado. "Vuestro afecto hacia España, expresado en tantas ocasiones, es de un gran valor para nosotros. Y los españoles nos sentimos realmente muy honrados de que en los cinco primeros años de vuestro Pontificado hayáis visitado España por segunda vez", ha destacado. Además, don Felipe ha comentado que en el mes de agosto del próximo año 2011, España tendrá "nuevamente el honor" de recibir en Madrid para celebrar la Jornada Mundial de la Juventud. "¡Gracias Santo Padre por todas estas visitas y particularmente por la de hoy y mañana!", ha exclamado.

Durante su saludo, el Príncipe de Asturias, en gallego, ha resaltado que "hace tiempo" que en "estas tierras gallegas, de gentes amables y hospitalarias" esperaban su visita. "Sabemos de vuestra ilusión por acercaros a la maravillosa ciudad de Santiago de Compostela para orar ante la tumba del Apóstol. Una ciudad que os espera con los brazos abiertos, como ya lo hiciera en dos ocasiones inolvidables con vuestro predecesor, el Papa Juan Pablo II, quien nos dejó la huella profunda de su mensaje y afecto", ha comentado. Desde aquellas fechas se ha producido una verdadera eclosión en el número de peregrinos y caminantes que llegan a Compostela. Proceden de toda España, del resto de Europa y de Iberoamérica. Así mismo, llegan cada vez más del resto del mundo, de los demás continentes, realzando así la proyección y dimensión universal del Camino. El pasado mes de mayo la Princesa y yo quisimos también recorrer de nuevo uno de los tramos de este maravilloso itinerario espiritual y cultural. "Venís como peregrino a transmitir un mensaje de fe, de paz y de esperanza. Habéis querido así uniros a la multitud de jóvenes, adultos y mayores que recorren una ruta milenaria para llegar, en este Año Santo, a la imponente Catedral de Santiago, una gran joya arquitectónica concebida en el románico, que prepara con orgullo y esmero la celebración de su VIII Centenario en 2011", ha manifestado don Felipe.

El heredero de la Corona ha hecho hincapié en el "gran camino de encuentro y de diálogo, tan vinculado a la historia y cultura, que recorre y une a Europa desde hace siglos", que, ha añadido, "se ha convertido en verdadero símbolo de concordia, de fraternidad y de solidaridad". "Promueve valores y abre los espíritus. Nos convoca a la reflexión y al reencuentro con nosotros mismos, nos invita a superarnos, a afrontar retos y a alcanzar nuevas metas", ha aseverado. "Como pude señalar al concederse al Camino el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 2004, éste fue el primer proyecto europeo común; seguir atesorando este camino de diálogo y de conocimiento inagotables, es un maravilloso regalo de la Historia para España y para los ciudadanos de todo el mundo", ha apuntado en su saludo al Santo Padre. "Desde Santiago, España contribuyó a aunar valores y a ensanchar los horizontes de Europa. También hoy desea, como país moderno, abierto y democrático, transmitir desde Santiago su voz comprometida y solidaria con los problemas y necesidades de tantos pueblos y seres humanos", ha defendido. "Os deseamos, asimismo desde este momento, una agradable estancia en la espléndida ciudad de Barcelona que espera con gran ilusión vuestra llegada para la solemne dedicación del extraordinario templo de la Sagrada Familia", ha añadido. "Una vez más recibid la calurosa bienvenida en nombre del pueblo español, del Gobierno de la Nación y de las autoridades autonómicas y municipales de Galicia, así como en nombre de SS.MM. los Reyes, de la Princesa y en el mío propio", ha recalcado el Príncipe de Asturias. "Y muchas gracias, Santidad, por volver a España y querer aportarnos en estos días la profundidad y serenidad de Vuestras palabras", concluyó.

Fotografías: Carlos Rodríguez Arias
R.