El presidente de la Xunta acusa al ministro de Fomento de no querer una caja gallega solvente mientras que la ministra de Economía está dispuesta a rebajar la exigencia de capital básico

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha acusado al Gobierno de "exculparse", entre otros motivos, por su "improvisación" en el ámbito financiero, y ha lamentado que el ministro de Fomento, José Blanco, "parece que no quiere que Galicia tenga una entidad financiera solvente". Así se ha pronunciado el presidente gallego en declaraciones a los medios antes de participar en un almuerzo coloquio con Antonio Basagoiti en Vigo. Núñez Feijóo se ha referido a las manifestaciones realizadas por José Blanco y, en concreto, sobre su afirmación de que ya le había advertido de los riesgos de la fusión de las cajas gallegas en una reunión celebrada en su despacho.

El presidente de la Xunta ha calificado estas palabras como "sorprendentes" ya que, según ha apuntado, Blanco y él, "nunca" han mantenido una reunión en su despacho. En todo caso, ha señalado que le preocupa "muchísimo" la actitud del ministro porque "parece que no quiere que Galicia tenga una entidad financiera solvente". "Espero que no sea lo que aparenta, y que trabaje como el resto de fuerzas políticas, sociales y económicas, en favor de una entidad solvente y que tenga relación con los sectores económicos e industriales de Galicia", ha declarado. Núñez Feijóo ha criticado que "todos los fines de semana los miembros del Gobierno vienen a Galicia a exculparse" por decisiones del Ejecutivo, como la nueva reforma financiera, "la ausencia en el Xacobeo 2010, o frente a recursos que perjudican los intereses de la sanidad pública gallega". En el caso de Blanco, le ha acusado de "exculparse e, incluso, inventarse reuniones, lugares y fechas".

Con respecto al nuevo decreto del Gobierno sobre el futuro de las cajas y del mapa financiero, el presidente de la Xunta ha pedido que la normativa tenga en cuenta la necesidad, por un lado de que se facilite crédito a pymes y autónomos, y por otro, que permita sanear los balances de las entidades. Éstos son, según ha recordado, los parámetros que el Banco de España planteó a las entidades, entre ellas, a Novacaixagalicia. El titular del Ejecutivo gallego ha reprochado al Gobierno y al Banco de España su "improvisación" y su "cambio de las reglas del juego", por el perjuicio que suponen al sector financiero, al tiempo que ha advertido de que "hay muchísimas dudas sobre lo que quiere hacer el Gobierno y sobre su intencionalidad última -con respecto al nuevo decreto-".

Núñez Feijóo ha insistido en que la Xunta de Galicia trabaja para que haya una entidad financiera gallega, pese a que hay "muchísimos intereses económicos, financieros y políticos" en sentido contrario. Así, ha recordado que el "camino trazado" que va a seguir el Gobierno gallego es el de "garantizar la solvencia" de la caja gallega e "intentar que la entidad tenga vinculación directa con Galicia". Asimismo, ha pedido "sentido común" para que no se exija a las cajas "unos parámetros que no tienen que ver con la solvencia y el saneamiento de balances", y que "no se hagan reformas de reformas que estrangulen el crédito".

El PPdeG exige al Gobierno que se deje de "incoherencias" y diga a los gallegos y a su caja "por donde tienen que ir"

El portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Manuel Ruiz Rivas, ha criticado los "continuos vaivenes" del Gobierno central en relación al sistema financiero y la modificación de los requisitos de solvencia para las entidades. Por ello, le ha exigido que se "aclare", que se deje de "incoherencias" y que diga a los gallegos y a su caja "por donde tienen que ir y trabajar". Todo ello, ha demandado el portavoz popular en una rueda de prensa celebrada en la Cámara autonómica, tras pedir que se coloquen sobre la mesa "unas reglas claras" que no vayan "en contra" de las cajas o que les exijan "condiciones distintas" a las de los bancos. Y es que, los populares "creen" en las competencias de Galicia, pero ven necesario que el Estado "intente respetarlas al máximo".

Ruiz Rivas ha subrayado que las decisiones adoptadas "dentro de las competencias" que ostenta Galicia y su Parlamento han chocado con recursos del Ejecutivo estatal -la ley de cajas y el catálogo priorizado de medicamentos- y ha recalcado que las "cambiantes" decisiones de Zapatero en materia financiera se corresponden "siempre con lo contrario" a lo que dicta "la lógica" en un mercado de este tipo. "Crea más desconfianza y pone reglas de juego distintas a cajas y bancos", ha lamentado el portavoz popular, quien ha situado en el polo opuesto la "posición firme y que no cambia" de los populares. "Seguiremos apostando por la presencia de Galicia en el sistema financiero, por una caja solvente y gallega", se ha reafirmado.

El portavoz del PPdeG se ha referido a la decisión de la Corporación municipal de A Coruña de aprobar, en pleno y con el respaldo de todos los grupos -PSdeG, BNG y PP-, una moción en la que insta al Gobierno a "reconsiderar" el denominado 'Plan de reforzamiento del sector financiero' en lo que respecta a las cajas de ahorro por las repercusiones que el mismo tendrá Novacaixagalicia. "Mientras Pachi Vázquez -secretario xeral del PSdeG- no sabemos ya de lo que habla, el Ayuntamiento de A Coruña, bigobernado por PSOE y BNG, dice a Zapatero, esta vez con el apoyo del PP, que no toque la regulación, apoyando a Novacaixagalicia en todos sus extremos", ha apuntado Ruiz Rivas, convencido de que éste constituye un nuevo ejemplo de una actitud incoherente y de una política "que no se sabe a dónde lleva".

El BNG urge una postura gallega para defender Novacaixagalicia

El portavoz del Grupo Parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, ha urgido una postura de Galicia en defensa de la caja fusionada, Novacaixagalicia, para "garantizar" el sistema financiero gallego y "oponerse a la deslocalización" del ahorro. "No hay que esperar a contar con el decreto ley", ha advertido el diputado nacionalista, quien recuerda el convite realizado por el líder de su formación para hacer frente común de las tres principales fuerzas políticas. En rueda de prensa tras la reunión semanal del grupo, Carlos Aymerich ha criticado que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, esté "desaparecido" en el tema de las cajas. "El BNG envió un convite, pero un convite para hablar ya", ha subrayado el dirigente nacionalista, quien sostuvo la necesidad de que Galicia "tenga ya una posición sin esperar a que el Gobierno español, adopte ese decreto ley".

Aymerich ha recalcado que la postura gallega "no debe estar subordinada" a lo que decida Madrid, porque, augura y advierte, el Gobierno central "adoptará un decreto ley y fijará condiciones inalcanzables" para las cajas gallegas y el conjunto de estas entidades crediticias. En este sentido, se ha mostrado seguro de que la postura del Ejecutivo estatal es "muy clara: Que las cajas de ahorro desaparezcan" y "entregarle el 50 por ciento del negocio" del dinero español "a la banca privada". El portavoz del Grupo Nacionalista ha enfatizado que la Xunta "tiene que defender la capacidad de decisión" sobre las cajas de ahorros, "cuestionando la legitimidad y la competencia que tiene" el Gobierno español en materia de cajas, por un lado. A este respecto, recuerda que Galicia tiene "competencia exclusiva" en el territorio gallego y observa en la postura del Ejecutivo central una "invasión de competencias flagrante". En segundo lugar, y tras señalar que el PP con Mariano Rajoy votará "a favor" del decreto del Gobierno central, Aymerich ha incidido en que Feijóo "debe garantizar la capacidad de Galicia en materia de cajas garantizando y protegiendo la existencia de cajas de ahorro comprometidas con el país". "Oponiéndose a la privatización y a la deslocalización", ha resumido, Aymerich, cuál debe ser la actuación del mandatario gallego y su gobierno. Por ello, entiende que el presidente de la Xunta debe aclarar "de qué manera va a hacer que Galicia siga contando con entidades de crédito comprometidas" con la economía productiva, con el ámbito social y con la creación de empleo.

Aymerich también ha indicado que el BNG "nunca estuvo de acuerdo" con que fuesen los protagonistas de esta nueva etapa y, por lo tanto, desde este punto de vista insiste en que "quien tiene que decidir es la propia Xunta" y "no Gayoso, Mauro Varela o Moreda". "Feijóo debe decir de qué manera se van a tener cajas y de qué manera se van a corregir las desviaciones para que Galicia tenga cajas comprometidas con el país", ha manifestado. Aymerich ha evocado las peticiones de información, sobre todo por parte de los socialistas gallegos, sobre el estado en que se encuentran la caja única. En este sentido, recordó que el BNG "siempre pidió responsabilidades" a los dirigentes de las entidades y que es favorable a dar transparencia. "Siempre la pedimos mientras otros partidos políticos pactaban en Madrid y en el Parlamento gallego para mantener a los actuales dirigentes de las cajas tres años más al frente de las cajas", ha relatado el dirigente nacionalista, quien apuesta por que "expliquen" por qué pactaron. De esta manera, cree que los socialistas, y populares también, deben dar explicaciones sobre su postura anterior y la actual, al tiempo que ha considerado que "esos dirigentes que piden información" tienen al presidente de la Diputación de A Coruña, Salvador Fernández Moreda, como vicepresidente de la nueva entidad y, por lo tanto, les "puede dar toda y mucha información".

Salgado, dispuesta a rebajar la exigencia de capital básico a las cajas

La ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, está dispuesta a rebajar en medio punto la exigencia máxima de capital básico de las cajas de ahorros a una horquilla situada entre el 9% y el 9,5%, frente a la banda de entre el 9% y el 10% anunciada hasta ahora, según han informado a Europa Press fuentes políticas. Las cajas de ahorros consideran exageradas las nuevas exigencias de capitalización establecidas por el Gobierno y reclaman el mismo trato que el concedido los bancos, que deberán contar con un nivel mínimo de capital de disponibilidad inmediata del 8%, y así se lo han trasladado de manera informal al Ejecutivo.

El Gobierno tiene previsto presentar en la primera quincena de este mes un decreto ley en el que detallará su plan de recapitalización del sector financiero, a pesar de que persisten discrepancias al respecto entre el Banco de España y Moncloa, por una parte, y el Ministerio de Economía, por otra. El organismo regulador de los mercados y Presidencia del Gobierno no son partidarios de rebajar las exigencias de capitalización a las cajas de ahorros, mientras que el departamento que encabeza Salgado es más proclive a recoger algunas de las reivindicaciones de las cajas de ahorros.

La postura del Banco de España es cercana a la de los presidentes de Santander y BBVA, Emilio Botín y Francisco González, partidarios de mayores requisitos de capital a las cajas frente a los bancos por considerar que entrañan más riesgo que éstos, sobre todo por su exposición inmobiliaria. Además, comparten la hipótesis de que las cajas de ahorros empañan la imagen del sistema financiero español en el exterior, lo que afecta negativamente a la cotización de los bancos en los mercados, así como a sus posibilidades de obtener financiación mayorista.

El presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y de La Caixa, Isidro Fainé, y el presidente de Caja Madrid y de Banco Financiero y de Ahorros, Rodrigo Rato, estiman que una regulación que fija un trato discriminatorio entre bancos y cajas en detrimento de éstas distorsiona la competencia y no se justifica por razones objetivas.

Las cajas sostienen que no padecen ningún problema de solvencia, sino que, al contrario, gozan con un capital básico del 7% en la mayoría de los casos, que supera a las exigencias internacionales de Basilea III que aún no han entrado en vigor. Los dos nuevos grupos de cajas catalanas, Unnim y CatalunyaCaixa, y la fusión de las dos entidades gallegas en Novacaixagalicia son los únicos que por el momento no alcanzan este umbral, junto a un solo banco, Bankinter. Por otro lado, las cajas de ahorros confían en que los recursos obtenidos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) por importe global de 11.600 millones de euros y a un interés del 7,75% anual puedan computar como capital.

En lo que sí coinciden bancos y cajas es en que las mayores exigencias de capital establecidas por el Gobierno pueden incidir negativamente en la concesión de crédito, así como en el nivel de provisiones para hacer frente a eventuales impagos. El Gobierno anunció el pasado 24 de enero nuevas medidas para reestructurar el sistema financiero español centradas en aumentar la capitalización de las entidades financieras, que cuentan con el respaldo del FROB en caso de que la inversión privada sea insuficiente.
Tras identificar una necesidad de nuevo capital por importe máximo de 20.000 millones de euros, el Gobierno ha dado de plazo a las entidades hasta el próximo mes de septiembre para reforzar su solvencia por sus propios medios. Concretamente, los bancos deben elevar su capital básico disponible de forma inmediata (core capital) a un mínimo del 8%, mientras que las cajas de ahorros deberán superar una horquilla de entre el 9% y el 10%. Si las entidades financieras no logran reforzar su capital de máxima calidad por su cuenta, el FROB lo hará de forma temporal con recursos públicos a cambio de una participación en su capital y las obligará a que se conviertan en bancos.

Fotografía: archivo GD / Xunta de Galicia.