Empresarios piden reflexionar sobre la necesidad de suprimir servicios públicos prescindibles y privatizar los de un coste desproporcionado

Los empresarios gallegos han remitido un informe con propuestas al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, al que trasladan periódicamente sus iniciativas. La patronal gallega incluye entre estas propuestas la posibilidad de "reconsiderar el papel de las diputaciones provinciales" y la de estudiar "alternativas a la pervivencia de ayuntamientos con población inferior a los 4.000 habitantes". También pide, en el ámbito de la administración pública, el reconocimiento de la deuda de las administraciones con empresas. Asimismo, entre las propuestas aparecen la reducción de la carga impositiva de origen estatal, autonómico y local; así como que se simplifique y rebaje el impuesto de sociedades y se reforme el pago del IVA, con el fin de que las empresas lo puedan diferir hasta el momento en que se haga efectivo el cobro de la factura.

La patronal gallega plantea establecer mecanismos fiscales "ventajosos" para las colaboraciones público-privadas en sectores productivos y proyectos considerados estratégicos. Dentro del área de financiación, apuestan por crear mecanismos compensatorios entre las deudas tributarias y de la Seguridad Social y las deudas de las administraciones públicas con las empresas. En este sentido, han apuntado que esto correspondería al Estado. En cuanto a las ayudas de la Xunta, piden mejores condiciones de financiación del capital circulante del Igape, reforzar el sistema de avales de las Sociedades de Garantía Recíproca (SGR) y una mayor diversificación de las fuentes de financiación a través de la ampliación y potenciación de la oferta de instrumentos.

La CEG ha sugerido también establecer una línea de avales específicos para pymes dirigidos a su internacionalización, así como mejorar el tratamiento fiscal de sus actividades de exportación e importación. Piden, a mayores, fomentar acuerdos comerciales con países en materia tecnológica y el impulso de nuevas modalidades de exportación, como la venta de tecnología, patentes o know-how.

La patronal propone que se mejoren los incentivos fiscales para las actividades de I+D, que se flexibilice "al máximo" el sistema de gestión de las ayudas públicas y favorecer que la investigación y desarrollo de las universidades se oriente hacia la empresa. En infraestructuras, los empresarios gallegos reclaman que las restricciones presupuestarias "no paralicen las inversiones previstas en proyectos determinantes para garantizar la competitividad de Galicia". Los empresarios destacan que el documento remitido a la Xunta está pensado en "un momento complicado para las empresas gallegas, tras la enorme inestabilidad que supuso 2011" y con las previsiones "negativas" para este año.

La CEG ha resumido en cuatro puntos esenciales, que van desde avanzar en eficiencia y austeridad en las cuentas públicas, con "una correcta conjugación entre el ajuste fiscal y la revitalización económica", hasta promover el ajuste fiscal "por el lado del gasto corriente", de forma que se mantenga "estable" la presión sobre las empresas. Además, los empresarios insisten en que los recursos disponibles deben destinarse a "inversiones productivas para reactivar la demanda, evitando que el ahorro se concentre en el lado de la inversión". Por último, reclaman "facilitar la financiación a empresas, en todas sus vertientes".

El presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), Antonio Fontenla, ha considerado "inadecuada e imprudente" la convocatoria de una huelga general por parte de la CIG. Antes de participar en un acto con el alcalde de A Coruña, Carlos Negreira, en la sede de la Confederación Empresarial Lucense, ha argumentado su rechazo por la "situación que atraviesa el país". "No me parece adecuado porque parece, además, que se pretende coaccionar a la reforma del Gobierno".

Sobre la reforma laboral y lo que ha trascendido de la misma, ha dicho que lo que conoce no le satisface. "No nos acaba de convencer", ha dicho, aunque ha instado a esperar a su aprobación y "no ser como algún sindicato que se manifiesta previamente contra la misma". Para el presidente de la patronal es preciso que haya "unas leyes laborales iguales o parecidas" a las de los competidores. "Estamos en Europa, dentro de un mercado abierto y tenemos que jugar con las mismas normas, si no, no seremos competitivos", ha defendido.

Sobre si entiende que los bancos, con el abaratamiento de la vivienda que el Gobierno prevé que provoque la reforma financiera, haría competencia a las constructoras, Fontenla ha lamentado que "estén dando financiación para aquellas viviendas que tienen ellos en sus stocks y para las que tienen los demás no hay financiación". "Ese es un tema que habrá que estudiar, porque este país recuperará un pequeño pulso de empleo cuando la construcción se mueva".